Sánchez se olvida de los afganos tras hacerse la foto y quiere llevar a Kosovo a los nuevos evacuados
El Gobierno de Pedro Sánchez se ofreció el pasado agosto a convertirse en el principal receptor de refugiados de Afganistán, pero ahora apuesta por derivar a otros países el flujo migratorio que se prevé para los próximos meses. El Ejecutivo trabaja en un plan para que España lidere, junto a la Unión Europea, la instalación de un gran campo de refugiados en Kosovo. Unas instalaciones en las que España colaboraría en su gestión y construcción.
Fuentes diplomáticas confirman a OKDIARIO que esos planes están sobre la mesa de Moncloa y ya están avanzados. Se trataría, explican, de poner en marcha un gran hub de recepción de refugiados afganos, similar al que organizó el Gobierno de Sánchez en la base aérea de Torrejón de Ardoz durante el pasado mes de agosto. Las instalaciones militares madrileñas sirvieron de puerto de entrada para miles de afganos que huían de Kabul tras la vuelta al poder de los talibanes.
En este caso, el territorio con el que tanto Bruselas como España ya han iniciado conversaciones es Kosovo, un territorio no reconocido como Estado por España y de reciente creación (2008). Tan sólo 90 de los 193 países que componen las Naciones Unidas han reconocido oficialmente su soberanía. De momento, Kosovo ya ha aprobado asumir durante un año la protección de 2.500 evacuados afganos. Pero podrían ser varios miles más en un futuro, que permanecerían un tiempo en este territorio y posteriormente serían repartidos por los países de la UE mediante un sistema de cuotas aún no pactado.
Muchos de los detalles del plan, explican fuentes diplomáticas, aún están pendientes de ser negociados. De hecho, ni siquiera Kosovo ha aceptado aún la proposición, aunque la vería con buenos ojos: podría estar en juego un futuro reconocimiento como Estado por parte de España, uno de los pocos países de la UE (con Rumanía y Eslovaquia) que aún no lo han hecho.
Mientras, España ya ha desmantelado la mayoría de infraestructuras instaladas en la base de Torrejón de Ardoz, una vez que los más de 2.000 afganos recibidos en España ya han sido recolocados en otros alojamientos temporales. No se espera, explican fuentes militares, que se vuelvan a poner en funcionamiento de cara a una segunda oleada de evacuaciones. Moncloa da por concluido su esfuerzo humanitario y a partir de ahora ese hub solidario recaerá en otros países, previo pago de una cuantía que no ha trascendido.
Fin al ‘photocall’
El Gobierno da así un giro a su política sobre los refugiados afganos. Tras ofrecerse como puerta de acceso a Europa de los evacuados de Kabul, Sánchez y sus ministros convirtieron durante una semana la base aérea en poco menos que un ‘photocall’.
En apenas 5 días, los que siguieron a la llegada del primer avión, las instalaciones militares recibieron hasta 10 visitas ministeriales. Incluida la del propio Sánchez, acompañado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en una minicumbre improvisada y a la que fueron convocados medios de comunicación de toda Europa.
Aquel ‘photocall’ fue algo excepcional en toda Europa. Ningún otro líder europeo ni sus allegados acudieron a hacerse la fotografía con los afganos refugiados, a pesar de que países como Alemania, Francia o Italia evacuaron a un número mayor de personas.